Se necesitan más de 25 mil pesos para cubrir la canasta básica
Los precios de los productos que integran la canasta básica total -que miden el umbral de ingresos que requiere una familia tipo para no caer en la pobreza- subieron en noviembre 4% respecto al mes previo, al alcanzar los $25.206,03, informó hoy el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
Los precios de los productos que integran la canasta básica total -que miden el umbral de ingresos que requiere una familia tipo para no caer en la pobreza- subieron en noviembre 4% respecto al mes previo, al alcanzar los $25.206,03, informó hoy el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
Por su parte, la canasta básica alimentaria – que mide los ingresos que necesita una familia tipo para no caer en la indigencia- también avanzó 4% hasta los $ 10.122,9.
En tanto, en los últimos doce meses, la canasta básica total y la canasta básica alimentaria subieron 57,3% y 54,1, respectivamente.
La canasta básica total está compuesta por productos alimenticios, indumentarias y costos de los servicios públicos; mientras que la canasta básica alimentaria se realiza en base a los alimentos imprescindibles para cubrir las necesidades de subsistencia.
Noviembre es el segundo mes consecutivo en el que la suba porcentual de ambas canastas fue similar. En octubre subieron 7,5% y en noviembre, 4%.
El incremento más alto en lo que va del año se verificó en septiembre, cuando la variación de la canasta básica alimentaria avanzó 8,5% y la canasta básica total, 8,1%.
En noviembre, el índice de precios al consumidor (IPC) a nivel nacional registró una suba de 3,2%, con una desaceleración de 2,2 puntos porcentual respecto a octubre pasado, cuando el incremento fue de 5,4%.
De esa forma, entre enero y noviembre el indicador subió 43,9%, mientras que en los últimos doce meses avanzó 48,5%.
Por categorías, en noviembre el avance más importante se registró en los productos que integran el denominado IPC Núcleo, con un incremento de 3,3% a nivel general.
La inflación núcleo o “core inflación” agrupa al conjunto de bienes y servicios que no se ven afectados por efectos estacionales ni por ajustes regulatorios del Estado. Su importancia radica en que permite proyectar la tendencia de precios a mediano plazo.